jueves, 17 de noviembre de 2011

Donde reposan las aguilas

Sucedió una vez, que un naturalista estaba dando una vuelta por una granja, y al mirar dentro del gallinero vió entre los pollos una gran águila.
Averiguó que el granjero había encontrado un huevo gigante y lo puso junto a los huevos de las otras gallinas para que lo incubaran. Cuando el granjero descubrió al aguilucho recién nacido tan sólo pensó que era un polluelo un poco distinto de los demás, pero lo puso junto a los otros para que se criara con ellos.
Este naturalista, fué a ver al granjero y le dijo: ¿Sabe que tiene a un águila ahí entre los pollos?.
" Yo no tengo ningún águila, sólo pollos" replicó el granjero.
"Venga aquí, y le enseñaré que tiene un águila" El naturalista llevó al granjero a donde estaba el águila y dijo. " Eso es un águila".
" no, solo es un pollo".
" Yo sé como es un águila. ¿ Ha visto alguna vez a un pollo con una envergadura en sus alas de 2 ms.? Es un águila"
" Es un pollo".
" Le demostraré que es un águila"
El naturalista tomó al águila y la puso en uno de los postes de la valla . Le dirigió su cabeza hacia el sol y le susurró al oido. "Tú eres un águila ! vuela!".
El águila miró al cielo y volvió luego su mirada hacia los pollos y finalmente bajó del poste y fué hacia los pollos.
El granjero replicó rapidamente. " Lo vé, le dije que era un pollo".
El naturalista, meneando su cabeza dijo "No, es un águila, mañana se lo demostraré".
Al día siguiente, el naturalista volvió temprano y lleno de ánimo.
Cogió al águila, la puso sobre la vuelta, en lo alto del establo y le dijo : " eres un águila, ! vuela!" Otra vez, dirigió la cabeza del águila hacia el sol, pero el águila, después de mirar al cielo, de nuevo volvió su vista hacia los pollos y bajó hasta donde se encontraban ellos.
El granjero enseguida comenzó a menear su cabeza.
Al día siguiente, el naturalista volvió temprano y se llevó al granjero y al águila a una montaña muy alta desde donde el águila ya no podía ver el corral.
Posó al águila en el borde de un precipicio, dirigió su cabeza hacia el sol y le dijo: " eres un águila ! vuela!".
El águila miró arriba, hacia el sol y luego no pudo ver ningún corral; extendió sus alas, y voló hasta perderse en la lejanía y no regresó.
El naturalista miró al granjero y dijo " era un águila".
Cada uno de nosotros nace siendo un águila. Desafortunadamente, muchos fuímos criados en un gallinero. No me refiero a tu hogar, por favor, no te sientas ofendido por esto. Pero fuímos criados creyendo que éramos pollos. Vivimos como pollos porque crecimos entre ellos. Uno piensa " todos son pollos a mi alrededor, así que mejor que yo sea también un pollo. No quiero ser un águila y causar problemas a los demas".
La primera impresión que quiero que tengas de tí es esta: Eres un águila . Viniste a la tierra con una herencia eterna como hijo o hija de Dios. Tienes el potencial para llegar a ser alguien grande. Recuérdalo, No lo olvides. Cuando te pongas ante el espejo, mírate como a un águila; un hijo de Dios.

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